Visitando Dalston Coffee – Un proyecto con alma londinense y corazón barcelonés
- Jose C
- 23 oct
- 3 Min. de lectura
¡Muy buenas cafeteros!
Hoy os quiero hablar de una visita muy especial que hice hace poco a uno de los tostadores que tenemos en la web y que, desde que empecé con Specialty Coffee Market, me hacía mucha ilusión conocer más de cerca: Dalston Coffee.
La historia de Dalston empieza en el este de Londres, en el barrio del mismo nombre, donde Borja, su fundador, descubrió en 2014 el mundo del café de especialidad. Aquel primer contacto fue tan fuerte que solo tres años después, en 2017, abría su propia cafetería en pleno Raval de Barcelona. Un rincón pequeño, bonito, con mucha personalidad… muy Dalston, o eso me pareció a mi 😄
De multiroaster a tostar su propio café
Los primeros pasos fueron como multiroaster, sirviendo cafés de otros tostadores, pero en 2020 dieron el salto y empezaron a tostar su propio café, lo que les permitió elegir exactamente lo que querían ofrecer.
Primero Borja empezó tostando con un amigo, luego él solo, y ahora ha decidido delegar esa parte tan clave en alguien que conoce bien el café: Sebas, actual Head Roaster. Tuve la suerte de conocerle en el CoffeeFest de Madrid 2025, donde ya se notaba su pasión por el tueste y su interés por el café como producto de especialidad. Un fichaje muy top.
Charlas, cata y un tostador lleno de luz
La visita fue un planazo. Me fui con Sebas a las afueras de Barcelona, donde tienen el tostador: un espacio amplio, bonito y con luz natural que invita a quedarse. Tuvimos una charla muy interesante en el coche, de esas que te hacen pensar en lo bonito (y difícil) que es hacer accesible un producto gourmet como el café sin perder calidad ni esencia.
Ya en la nave, compartimos una cata muy especial. Me enseñaron una técnica que no había practicado antes: la cata higiénica, donde la cuchara que toca el café nunca toca tu boca. Parece más liosa de lo que es, pero al final resultó sencilla y curiosa de hacer.
Y es que, aunque ahora Borja se dedica más a las áreas de gestión de la empresa, nunca se ha despegado del producto: todas las catas las hacen juntos y él es quien da el visto bueno final. Ese equilibrio entre delegar bien y seguir cuidando el corazón del proyecto me pareció clave.
Buen rollo y raíces bien plantadas
Le pregunté por esa idea tan característica de las cajitas de café que tienen, y me contó que todo viene del barrio londinense de Dalston, que le marcó mucho y del que tomó no solo el nombre, sino el estilo. También hablamos sobre el ambiente entre tostadores, y me alegró mucho escuchar que hay muy buen rollo entre los que comparten esta pasión en Barcelona, incluso sabiendo que hay marcas grandes con más recorrido.
Lo que me encontré fue un proyecto humano, con sinergia, con trabajo y con coherencia. Gente que sabe lo que busca, lo que quiere ofrecer, y cómo hacerlo con cercanía y sin complicarse la vida con artificios.
Gracias de verdad a Borja por abrirme las puertas y a Sebas por compartir su sabiduría, por el tiempo compartido y por seguir apostando por un café de especialidad con alma. Nos vemos en la próxima.
Comentarios